Las carillas dentales son un tratamiento de estética dental. Se trata de unas láminas muy finas que colocamos sobre el diente para mejorar, estéticamente, su aspecto.

Este tratamiento ya hace casi 90 años que se realiza. En la década de 1930, Charles Pincus, dentista Californiano creó las primeras carillas para mejorar el aspecto y las sonrisas de los actores y actrices de Hollywood que no tenían unos dientes perfectos. A él debemos la idea y así nacieron las carillas dentales. 

Desde su origen, tanto el tratamiento como los materiales han evolucionado muchísimo a mejor. Hoy en día ya no debemos sufrir por que se desenganchen o se rompan de forma relativamente fácil como ocurría hasta hace bien pocos años. Hoy, con unas excelentes carillas dentales sentiremos que llevamos nuestros propios dientes. La sensación es realmente maravillosa, además de mejorar totalmente tu sonrisa.

Hoy existen 2 tipos de carillas en el mercado. Las de composite y las de cerámica.

Las carillas dentales de composite

Respecto a las carillas de composite, es un material derivado del que utilizamos para los empastes, utilizamos un tipo de composite mucho más estético y con propiedades ópticas más bonitas que el que utilizamos para los empastes.

Las carillas dentales de composite pueden hacerse en laboratorio (nosotros desestimamos esta opción) o directamente en boca. Realizamos el mismo estudio que para las carillas de cerámica, con lo cual el paciente ya conoce cómo va a ser el resultado final, pero el paciente sale el mismo día con las carillas colocadas a partir de nuestro trabajo manual que realizamos directamente en la consulta, no en laboratorio.

Las carillas de composite las recomendamos para pacientes más jóvenes ya que casi nunca hay que “tocar” el diente y por tanto es un tratamiento reversible. Cuando el paciente quiera renovar / mejorar la estética las podríamos quitar y hacer unas de cerámica.

Las carillas dentales de cerámica

Las carillas dentales de cerámica si que se crean en laboratorio. Se trata de láminas muy finas de cerámica y escogemos el material dependiendo de hasta dónde queremos llegar. Con las carillas dentales de cerámica, debemos recortar un poco el diente de tal forma a que tengamos el espacio adecuado para colocar la carilla.

Las Carillas de cerámica

Las carillas de cerámica son más bonitas estéticamente que las de composite. Si tu prioridad total es la estética nos hemos de decidir por las carillas de cerámica. Tengamos en cuenta que la cerámica, como material, no sufre alteraciones con los años, ni se van a teñir ni se van a degradar comamos lo que comamos o fumemos lo que fumemos (aunque desaconsejamos esto último por razones obvias de salud).

La desventaja de las carillas de cerámica es que normalmente hemos de tocar un poco los dientes.

Las Carillas de composite

La gran ventaja de las carillas de composite es que hay que tocar muy poco los dientes. El método también es mucho más rápido que para las carillas de cerámica, porque el mismo día el paciente regresa a casa con sus carillas definitivas.

El Composite no deja de ser una resina y por tanto es un material que se degrada, con lo cual será necesario un mantenimiento con cierta frecuencia (anual o bianual) para pulir, a volver a poner brillo.

Ojo con los pacientes fumadores porque es este caso pueden salir manchitas, o también si tomamos mucho café podemos mancharlas.

Finalmente en el caso de las carillas de composite la estética no es tan excelente como en las carillas de cerámica.

El primer día, inicialmente te explicamos con todo detalle en qué va a consistir el tratamiento. El mismo día, si decides que te interesa el tratamiento, podemos realizar tu estudio previo.

Haremos:

a nivel de orientación estética,

• fotos del interior de tu boca
• fotos faciales en diferentes circunstancias para conservar una imagen de tus diferentes gestos, que provocan que muestres más o menos dientes

también realizaremos

• un escáner intraoral completo de tu boca para conseguir un registro de máximo detalle para usarlo de base digital para la creación de las carillas

Una vez tengamos todo esto, el protésico dental realizará un diseño de los dientes siguiendo nuestras instrucciones, a partir de las fotografías y el resultado del escáner.

En la siguiente visita habremos impreso las imágenes virtuales y además probaremos en la boca del paciente unas muestras para que te veas como realmente vas a quedar antes de su colocación final.

De esta forma, con estas pruebas, antes de iniciar el tratamiento, sabremos lo que te gusta y lo que no te gusta exactamente. Por tanto podremos hacer retoques antes de crear las carillas definitivas exactamente como hemos consensuado que las quieres.

PASO 1

En una misma sesión, y una vez aprobado por ti nuestro estudio previo, recortamos muy levemente aquellos dientes que lo necesiten. Para ello empleamos anestesia, con el fin de que durante el proceso no sientas ninguna molestia ni dolor.

PASO 2

Volvemos a escanear tu boca  con el objetivo de que el protésico tenga esa base para crear las carillas definitivas.

PASO 3

Colocaremos tus carillas provisionales.Podrás volver a casa y, durante los días que emplea el protésico en hacer las carillas definitivas, podrás valorar si te gustan a partir de las provisionales o si deseas cambiar algo en ellas, con lo que podremos realizar las modificaciones siempre a tiempo antes de colocar las carillas definitivas.